¿Qué protección auditiva debe utilizarse en el taller?
Los dispositivos de protección auditiva en el taller son esenciales para proteger uno de los aspectos más delicados de su salud. Se trata del aparato auditivo, los oídos. Este órgano nos permite oír y mantener el equilibrio, pero si no lo protegemos de los ruidos fuertes, corremos el riesgo de sufrir daños graves. Por eso es permanente.
Solemos prestar atención a otros riesgos en el taller, cuando trabajamos con sierras de cinta y sierras circulares nos preocupan los efectos de las cuchillas, pero nunca debemos subestimar el riesgo de perder la audición -parcial o totalmente- debido al ruido fuerte y continuo. La exposición al ruido, especialmente si esta situación se prolonga en el tiempo, puede causar daños a nuestra salud al provocar una de las enfermedades profesionales más comunes.
Los temas del puesto
Definición de la pérdida de audición inducida por ruido
Llevar dispositivos de protección aud itiva en el taller significa reducir significativamente el riesgo de registrar un caso de pérdida de audición inducida por ruido. Es decir, la pérdida progresiva de audición -hipoacusia significa oír menos- debida al ruido, que, como sugiere el sitio webdel Inail, no debe superar determinados parámetros:
El valor de acción inferior de 80 dB(A), el valor de acción superior de 85 dB(A) y el valor límite de 87 dB(A). Está prohibido superar el valor límite.
La presencia de ruido continuo también puede provocar otras molestias. Evidentemente, estas indicaciones se refieren sobre todo a las personas que trabajan a diario, durante varias horas, en contacto con máquinas industriales. Pero incluso quienes sienten pasión por el bricolaje y el bricolaje deben respetar siempre las normas que nos obligan a utilizar equipos de seguridad como calzado de seguridad y dispositivos de protección auditiva.
Diferencia entre protectores auditivos activos y pasivos
La mejor solución para trabajar por encima de los 85 decibelios, umbral a partir del cual cabe esperar daños auditivos, es utilizar los protectores auditivos adecuados. En la mayoría de los casos, la mejor solución son los protectores auditivos. La principal distinción que hacemos es entre protectores auditivos activos y pasivos.
Estos últimos son los clásicos tapones y auriculares con material aislante, mientras que los modelos que entran en la primera categoría disponen de micrófonos que registran el ruido y lo reproducen atenuado.
La principal diferencia es que las protecciones activas te dan más control sobre tu entorno, se utilizan cuando necesitas dar una referencia clara de lo que ocurre a tu alrededor.
Cómo proteger su audición en el taller
Existen varios elementos que pueden ayudarle a proteger su audición. Tienes que elegir el que mejor se adapte a tus necesidades pero que también te permita amortiguar el ruido de la mejor manera posible. Por encima de 85 decibelios de ruido continuo y 137 de estímulos súbitos necesitas protegerte. ¿Cómo?
Tapones para los oídos
Son tapones clásicos fabricados con material blando. Se adaptan al canal auditivo y adoptan su forma, protegiendo del ruido en condiciones de uso prolongado y ambientes húmedos. No hacen sudar y no son extenuantes. Por otro lado, se salen con facilidad y ofrecen poca protección si se introducen de forma incorrecta.
Existen modelos desechables y reutilizables con un cómodo cordón que puede usar para colgárselos del cuello cuando no los use. Son fáciles de poner y utilizar para proteger el oído: basta con presionar los auriculares con los dedos e introducir el elemento en el canal auditivo, donde tomará su forma.
Otra solución es la diadema con tapones: es la solución ideal para evitar que estos elementos se caigan y se salgan de la oreja, pero no tienen mucho poder aislante. Además, hay transmisión de ruido cuando la ropa toca elelemento rígido que sirve para sujetar los tapones.
Para leer: Cómo hacer un agujero en hormigón
Auriculares con supresión de ruido
Entre los distintos dispositivos de protección auditiva, sin duda tenemos las orejeras aislantes. los clásicos elementos que cubren completamente el oído y amortiguan cualquier ruido. Existen diferentes modelos con mayor o menor capacidad de protección frente a sonidos fuertes, son sin duda las mejores soluciones.
Pero son incómodos y suelen hacer sudar mucho cuando hace calor. Luego están los ya mencionados auriculares activos, que permiten amortiguar el ruido de forma pensada y tal vez combinarlos con sistemas de comunicación entre colegas por radio. Otra aplicación útil: la que permite combinar los auriculares con un casco protector.